Cambiar un HDD (disco duro mecánico) por un SSD (unidad de estado sólido) puede duplicar o incluso multiplicar varias veces la velocidad percibida del ordenador, pero el impacto depende del tipo de tareas que hagas y de otros componentes de tu PC.
Para un ordenador con HDD antiguo, cambiar a un SSD puede sentirse como duplicar o incluso triplicar la velocidad general del sistema, porque la mayor parte del “retardo” proviene de los tiempos de lectura/escritura del HDD. Si quieres un salto aún mayor, un SSD NVMe (si tu placa madre lo permite) será más rápido que un SATA.
Qué mejora al poner un SSD.
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Arranque del sistema operativo
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Con un HDD: Windows puede tardar 60-120 segundos en arrancar.
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Con un SSD: puede bajar a 15-25 segundos o menos.
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Carga de programas y juegos
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Programas pesados como Photoshop, AutoCAD o juegos grandes cargan muchísimo más rápido.
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Lo notarás especialmente al abrir archivos grandes o al cambiar entre programas.
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Velocidad de lectura/escritura
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HDD típico: 80–160 MB/s.
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SSD SATA: 500–550 MB/s.
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SSD NVMe: 2000–7000 MB/s o más.
Esto significa que transferir archivos grandes puede ser 3–5 veces más rápido con un SSD SATA y hasta 10–50 veces más rápido con un NVMe.
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Menos tiempo de espera y más “fluidez”
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Al mover archivos, descomprimir o actualizar software, notarás que el sistema responde casi al instante.
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Qué no mejora tanto.
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Velocidad de CPU o GPU: Si tu procesador o tarjeta gráfica es antiguo, los cálculos y los gráficos seguirán limitados por esos componentes.
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Velocidad de RAM: Si no tienes suficiente RAM, cambiar a SSD no solucionará el “lag” al abrir muchos programas al mismo tiempo.
Hagamos un ejemplo práctico comparando un HDD tradicional con un SSD SATA, en un PC típico de escritorio o portátil de gama media. Tomaremos tiempos aproximados de arranque, carga de programas y transferencias de archivos.
1. Arranque del sistema operativo (Windows 10/11)
Unidad | Tiempo de arranque |
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HDD 7200 RPM | 90 segundos |
SSD SATA | 20 segundos |
Diferencia: el SSD hace que el sistema arranque 4-5 veces más rápido. Es lo primero que notarás.
2. Abrir programas comunes.
Programa | HDD | SSD SATA |
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Chrome | 8 segundos | 2 segundos |
Photoshop | 20 segundos | 6 segundos |
Office Word | 10 segundos | 3 segundos |
AutoCAD | 40 segundos | 12 segundos |
Diferencia: abrir programas pesados puede ser 3-4 veces más rápido. La experiencia es mucho más fluida.
3. Transferencia de archivos grandes (ej. 5 GB)
Tipo de unidad | Velocidad aproximada | Tiempo estimado |
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HDD 7200 RPM | 120 MB/s | 42 segundos |
SSD SATA | 500 MB/s | 10 segundos |
Diferencia: el SSD transfiere archivos 4 veces más rápido.
4. Carga de juegos.
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Juegos instalados en HDD: pantallas de carga largas (30–60 segundos o más).
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Juegos instalados en SSD SATA: pantallas de carga cortas (5–15 segundos).
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Resultado: efecto o sensación de inmediatez al jugar.
Resumen visual de “percepción de velocidad”
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Arranque: 4-5× más rápido
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Abrir programas: 3-4× más rápido
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Transferencia de archivos: 3-4× más rápido
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Juegos: 2-6× más rápido en cargas
Nota: “Duplicar la velocidad” es un buen estimado para tareas diarias, pero en realidad algunas tareas se aceleran mucho más, especialmente las que dependen de lectura/escritura de disco. Suerte!
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